Un inédito show se realizó ayer en las dependencias de la Biblioteca Nacional de Chile.
Es posible que, desde su fundación el año 1813, a la fecha, el principal centro bibliográfico del país nunca haya recibido un exponente del power metal progresivo en sus dependencias o -mejor dicho- de la “música popular”, como fue denominado por el presentador.
La Sala América fue la que recibió a Erick Ávila, junto a los teloneros DruMBone, agrupación compuesta por bronces y una batería, quienes en menos de media hora desembolsaron unas brillantes versiones de clásicos de los 80.
Luego fue el turno del líder de Six Magics, quien con la buena compañía de Vicente Salucci, Rodrigo Aranda y Diego Letelier mostró lo mejor de su repertorio latino. Con un sonido que destacó por su claridad, el vamos partió con “La Joya del Pacífico“, “Volver“, y “Por una cabeza“.
Con una sala repleta, pero en un íntimo ambiente, Ávila agradeció el apoyo de Igned Records por la gestión para el inaudito show en el monumental edificio.
“Ranco” y un excelentísimo “Latin Groove” dieron muestra de la versatilidad de los músicos, quienes, sin abusar de su virtuosismo, convirtieron cada pieza en una perfecta armonía. “El Corralero” y “Chile Lindo“, marcaron otro respiro para que luego Ávila agregara que “llegó el momento de ponerse más metaleros“, con una tímida risa dado el lugar dónde se encontraba.
Fue así como el imponente edificio, construido por el prócer José Miguel Carrera, tembló con los riffs de “Binsfeld“, pero al mismo tiempo vibró con “La reina del Tamarugal“, convirtiendo en una fiesta la Sala América.
Finalmente “Maipo” y “Vica” bajaron las revoluciones por un leve instante, pues Erick no escatimó en rematar su variopinta mezcla de metaleros, y lo que parecían ser intelectuales de la cultura que estaban sentados en las butacas, con “Sube a nacer conmigo hermano“, “Orion” y un potentísimo grand finale con “Sad but true“, tocada junto a DruMBone, versión que se ganó un aplauso más que merecido.
Desconozco si los cueros, remaches y distorsiones a tubos se habían tomado antes la Biblioteca Nacional. No obstante, los que estuvimos ayer sentados, vimos algo que quedará en la retina. Una perfecta mezcla de armonía y virtuosismo, que finalmente se transforma en una verdadera familia. La familia Ávila, que de manera incondicional acompaña a su buen amigo a cada local en el que se instale junto a su querida guitarra.
Setlist
- La joya del pacífico
- Volver
- Por una cabeza
- Ranco
- Latin groove
- El corralero
- Chile lindo
- Binsfeld
- La reina del Tamarugal
- Maipo
- Vica
- Sube a nacer conmigo hermano
- Orion
- Sad but true
Fotografía: Roberto Yévenes.