TítuloConfinement
Duración42 Minutos, 30 Segundos
Año de Lanzamiento2011
GéneroDeath Doom Metal
SelloBF Prods.
Tipo de LanzamientoCD
Página WebOfficial Page
- Neglected Ages
- Memories of Nothing
- The Submission
- Into Convergent Agony
- The Mysteries That Time Forgot
- Where Mankind And Death Clash
- Confinement
- The Olden Obscurit
- In Plenitude With Death
- Pablo Valdés(Drums)
- Mauricio Barrios(Strings, Vocals, Lyrics, Keyboards)
- Orlando Arévalo(Vocals)
Cuando uno escucha un disco, sea del estilo que sea, muchas veces uno esperaría que el disco nos sorprendiera con algo nuevo, fresco, algo que revolucione lo establecido y que sacara al oyente del molde típico que tiene en la mente.
Como eso muchas veces no ocurre, porque no es necesario reinventar la rueda – en este caso un estilo – para hacer un disco de calidad, lo que se espera es que la propuesta entregada venga impregnada de honestidad, una palabra tan utilizada pero tan poco practicada. Honestidad en el sentido de crear música en base a los instintos más personales, sin actuar con la idea de crear algo para sonar a una banda determinada.
En el caso de Afasia, su primer larga duración Confinement nos deleita con un excelente death doom metal a la vieja usanza, que recuerda a trabajos antiguos de bandas como Amorphis, Tiamat, My Dying Bride, entre otros.
Y a pesar que hago referencia a estas bandas para contextualizar el disco, el trabajo de los chilenos es una propuesta que no viene a revolucionar el estilo, pero que se nota a leguas de distancia que es algo que les nace de dentro, sin ánimo de fingir sus temas para caer encasillados en algún estilo en particular.
Toman elementos básicos del Death Metal y los mezclan con texturas sonoras propias de los antiguos trabajo Doom Metal, creando un disco muy interesante de oír, que nunca aburre y en donde cada integrante aporta con su justa cuota para lograr un registro que a grandes rasgos no tiene puntos débiles. El sonido es lo suficientemente sucio para adecuarlo al estilo que tocan, pero cada instrumento es claramente perceptible.
La voz de Orlando Arévalo – aunque un poco plana y sin muchos matices – cumple con el cometido de buena manera. La batería de Pablo Valdés es un cimiento fundamental en el disco, prácticamente no tiene errores, maneja excelentemente los tiempos y crea las suficientes texturas para que el disco no llegue a sonar absolutamente plano. Y además Mauricio Barrios a cargo de guitarra, bajo, teclado y voces crea a través del primer instrumento mencionado las poderosas bases que soportan toda la placa; los riffs son potentes, no se desgasta en complejidades que lleven al oyente al aburrimiento o al desinterés. El bajo está presente sin destacar demasiado, pero tampoco es algo que se extrañe mucho, y el teclado aporta profundidad en los pasajes donde está presente.
Yo personalmente no soy un tipo que se desgaste analizando las letras de los discos, porque para mí la música es lo que lleva siempre el aura dentro de un disco. Lo que para mí es importante es que la sonoridad que provoquen las voces al cantar las letras suene acorde a los temas que se van escuchando. Sin embargo en contados casos me detengo a analizar las letras – aunque es complicado pillar letras que salgan de lo común – y en este caso me detuve ya que aunque las letras de este disco no hablan de nada que no se haya dicho antes – obscuridad, muerte, decadencia, etc. – sí encuentro que las letras están muy bien escritas, en el sentido de no utilizar los mismos recursos una y otra vez en todos los temas. Eso se aplaude ya que denota un interés especial en crear música de forma integral.
Los temas se suceden uno tras otro, en un disco que se muestra en extremo parejo – sin que esto sea un punto débil en el disco, para mí no lo es – sin embargo destaco el último tema In Plenitude With Death. Es lejos el tema más oscuro, por ritmo, melodía, ejecución, matices, todo. Es casi una remembranza de los antiguos trabajos Doom Metal de comienzo de los años ’90. Hacia el final, la entrada de los teclados de fondo le da un aura de oscuridad notable al tema. Creo que el haber elegido este tema para cerrar fue la mejor elección dentro del orden del tracklist. Además, deja la vara alta para lo que se pueda venir en otro disco.
Lo mejor del disco a mi parecer es que todos los elementos convergen de manera de crear un disco entretenido, fácilmente digerible, con una propuesta clara y un sonido potente, además de tener la cuota justa de duración y cantidad de temas. Hay cosas que quizás faltan para que el disco destaque de sobremanera pero es cosa de madurez dentro de la banda. A pesar de eso, el disco no peca nunca de poco sustancioso o ligero; por el contrario, es potente a más no poder. Es cosa de ir madurando las ideas que ya se tienen, para en el futuro crear un disco que sobrepase la vara que han dejado sobre ellos mismos. De ser así, se augura un excelente futuro para la banda.
La producción en temas como el sonido, y la presentación del disco están sobriamente adornadas, dándole un matiz de oscuridad que va en absoluta consecuencia con la música que Afasia ejecuta.
En resumen, un disco parejo pero extremadamente potente, bien trabajado y que aporta mucho a la escena nacional en el estilo que ejecutan. Espero poder presenciarlos en vivo pronto, porque muchos de sus temas son para cabecearlos monumentalmente.
Gran trabajo, felicitaciones a la banda, y a seguir trabajando. Un trabajo que vale la pena adquirir, y una banda que vale la pena apoyar.