TítuloThe End of Philosophy
Duración1 Hora, 9 Minutos
Fecha de LanzamientoOctubre, 2013
GénerosHeavy Metal, Metal Progresivo
SelloMylodon Records
Tipo de LanzamientoLP
- The End of Philosophy
- New Philosophy
- No More
- Darkened Skies
- Frozen Heart
- Farewell
- Fear Syndrome
- Nostalgia
- Like a Man
- Bringers of Rain
- Why are you so Far
- Felipe del Valle(Voces)
- Benjamín Lechuga(Guitarras, Coros)
- Nicolás Quinteros(Teclados, Theremin, Coros)
- Andrés Rojas(Batería)
- Marcos Sánchez(Bajo, Coros)
No es necesario un análisis tan acabado para notar que la escena musical chilena, en extensión a lo que ocurre a nivel país, es principalmente reactiva y suele estar conformada por bandas que absorben y finalmente hacen propio lo que nace en forma de innovación en alguno de los países que, musicalmente hablando, llevan la delantera. En este sentido, y en el pasado más cercano, uno de los subgéneros del Metal que tuvo una respuesta absorbente más notable, sin lugar a dudas fue el Metal Progresivo. La lista de agrupaciones nacionales que emularon e intentaron internalizar la propuesta liderada por bandas como Dream Theater, Symphony X o Pain of Salvation es tan extensa que, a la postre, fueron las agrupaciones capaces de ofrecer ese “no sé qué” extra las que sobrevivieron cuando el subgénero dejó de ser novedad.
Una de esas bandas es Delta. Y si con su anterior lanzamiento, ‘Deny Humanity’ (2010), dieron luces de porque sobrevivieron a la “moda”, con ‘The End of Philosophy’ dejan claro que más allá de absorber y emular los lugares comunes del género, han sido capaces de reinventarse y cimentar un camino que les es tan propio, que si alguien pretendiera arrebatárselo podría caer en el abismo de la copia. Las dos pistas que dan comienzo a la placa, The End of Philosophy y New Philosophy, sirven como muestra de esto, ya que aún cuando en ellas predominan las melodías cadenciosas, métricas cambiantes y dosis infartantes de virtuosismo instrumental, aquello que destaca es una personalidad y estructura musical diferente y refrescante que se encuentra en todos los rincones de esta excelente producción. El oboe de Jorge Galán en The End of Philosophy es evidencia de ello.
La rabia y energía contenida tras No More, una pieza con el innegable objetivo de desasir un despecho amoroso y sus indeseables efectos, es una mezcla de pura fibra Hardrockera y virtuosismo interpretativo, donde además comienza a alzarse la figura del sorprendente Felipe Del Valle (Voz), quien protagoniza los arreglos corales que forman parte de la marca registrada del quinteto capitalino, que lejos de pasar desapercibidos como un detalle de utilería, se muestran como uno de los elementos más destacables tanto del track como del compacto en su extensión. La base rítmica conformada por Andrés Rojas (Batería) y Marcos Sánchez (Bajo), se muestra incluso más cercana al Heavy Metal en solidez y muestra sus credenciales en un intermedio muy bien logrado.
La influencia que la escena progresiva norteamericana ejerce sobre el conjunto aparece firme en Darkened Skies, Frozen Heart y Like a Man, en un zig-zag de riffs violentos de naturaleza Thrash/Speed, hacia melodías y arreglos instrumentales con la firma evidente del encomiable talento en la composición que posee Nicolás Quinteros (Teclados, Theremin). El trabajo realizado en coros en estas piezas alcanza niveles épicos, dejando en claro que tras ellos hay un esfuerzo que se agradece con ganas. Las dos “estrellas” del conjunto, Quinteros y Benjamín Lechuga (Guitarra) brillan con luces propias, pero sin un protagonismo excesivo que fastidie, como suele ocurrir en bandas cuyos integrantes poseen un virtuosismo por sobre la media.
En el extremo opuesto, Farewell y Nostalgia, tal como sus nombres indican, muestran la veta sensible y melancólica que el conjunto sabe utilizar de tan buena manera. En Farewell, aparece la guitarra del virtuoso Gabriel Hidalgo (Sadism, ex-Six Magics) como clímax en una composición marcada por los detalles sonoros que Lechuga y Quinteros aportan con sus respectivos instrumentos, y un arreglo coral que sin buscar protagonismo termina marcando la pauta en la extensión del track. Nostalgia es un recorrido in crescendo desde la serenidad que Quinteros genera en el Theremin en conjunto a la guitarra acústica de Andrés Walker (Ex-Delta), hasta un final potente e intenso, de pura factura metalera.
Fear Syndrome es probablemente uno de los temas más experimentales que Delta ha compuesto en toda su carrera. Mezclando pilares del género progresivo con contratiempos arriesgados y poco usuales; aparece una montaña de sonoridades que sólo logran distinguirse a un elevado volumen. Las frases que Quinteros expele con las teclas, se revuelven con las guitarras limpias pero cargadas de efectos que Lechuga compuso para esta pieza. Tras esto, las líricas contienen una fuerte crítica social que parece inspirada en la Doctrina del Shock de la canadiense Naomi Klein. Es necesario destacar el trabajo que realiza en las letras Felipe Del Valle, al pasearse desde los sentimientos de amargura y desesperanza que dan forma a Fear Syndrome, a la cólera y evidente reprobación al sistema social imperante; y la explotación indiscriminada de los recursos naturales del planeta que aparecen en New Philosophy, Darkened Skies o la épica Bringers of Rain, que en la suma redondean una propuesta lírica generada en forma de una distopía, siguiendo la línea conceptual que ha ido desarrollando en las últimas placas el quinteto.
El broche de oro es Bringers of Rain, un opus que se alza por casi diez minutos de extensión y reúne grandes dosis de experimentación, con pomposidad y una pretensión que, sin rayar en lo vanidoso, logra su objetivo implícito: cerrar una producción en la cual la banda no escatimó en recursos. No solo por la presencia de John West (Royal Hunt, Artension) en las voces junto a Del Valle, sino también por una “puesta en escena” poco común a lo que nos tiene acostumbrados el ambiente musical a nivel nacional. Desde los ostentosos coros que marcan presencia y representan los gritos de la masa enfervorizada, hasta los duetos y duelos vocales que sostienen West y Del Valle; la composición en su totalidad funciona como el apogeo de todos los años de trabajo y experiencia que la banda ha adquirido, cuyo resultado es un placer para el oído de principio a fin, acompañado de una letra muy potente y acorde a los agitados momentos sociales que vivimos actualmente, por lo que los invito a leer y comprender con cautela el contenido y la idea tras las letras que dan forma a esta excelsa pieza musical.
El remake de Why are you so Far, la pieza que abre ‘Apollyon is Free’ (2004), contrasta lo que ha sido el proceso por el que ha atravesado la agrupación desde que lanzaran aquel prometedor debut hace siete años; con el estado actual de un conjunto que muestra una madurez, lucidez mental, solidez y el fiato que una banda requiere para dar el paso hacia una carrera internacional. Si ‘Deny Humanity’ fue una declaración de principios, esperemos que con ‘The End of Philosophy’ los cinco capitalinos logren obtener la atención y las oportunidades que merece una banda que, sin que quepa duda, está muy por sobre la media gracias a sus propios méritos.