TítuloDethroner - Blind Souls
Duración31 Minutos, 32 Segundos
Año de Lanzamiento2012
GéneroBrutal Death Metal
SelloAustralis Records
Tipo de LanzamientoCD
Página WebMySpace
- Pestilence
- Born Dead
- Sound of Sin
- Macabre Ending
- Transformation
- Narcolepsy
- Buried Alive
- The Blaze
- Apocaliptic Torment
- Mauricio Alvarez(Bajo)
- Alvaro Sequeida(Batería)
- Gonzalo Astudillo(Guitarra)
- Miguel Roa(Guitarra)
- Juan Torres(Voces)
Con 12 años a cuestas dentro de la escena nacional, Dethroner se alza como una de las bandas deathmetal con más actividad en la actualidad. Fruto de todo este tiempo de trabajo es lo que ahora nos presenta la banda. Su segundo álbum llamado Blind Souls, el que demandó largos 5 años en ver la luz.
Brutal deathmetal de excelente calidad es lo que esta banda nos ofrece, en poco más de 30 minutos que se pasan volando.
Comentar este disco tema por tema no creo que sea lo más apropiado para este disco. La razón es bastante sencilla.
A pesar de que al escuchar el disco no parece estar oyendo una y otra vez el mismo tema, hay características que prácticamente se repiten en todas las canciones. Baterías sin tregua, un grandioso y virtuoso trabajo en las guitarras, un bajo bastante presente y consistente respecto a las guitarras, y una voz más que apropiada para el disco.
Quizás un detalle a criticar dentro del disco sea precisamente el último detalle mencionado anteriormente. La voz cumple a cabalidad con su trabajo, pero se extraña algún tipo de matiz dentro del trabajo desplegado. Hay algunos pasajes con cierto grado de matiz pero en términos generales se evidencia un trabajo demasiado parejo, sin que lo realizado sea malo o deficiente. Calza perfecto, pero se agradecería un matiz.
En términos generales es un disco parejo, y esto está también demostrado en el hecho que no hay un tema que sea el más fuerte dentro el disco, sino que todos tienen casi la misma dosis de brutalidad, técnica e intensidad.
De hecho, los “highlights” del disco son los solos de guitarras de casi todos los temas. Tanto los solos en sí como la melodía de fondo que la acompaña tienen un poder que te deja pasmado. Creo que esos son los momentos realmente memorables dentro del disco. Se felicita el trabajo hecho por las guitarras de Gonzalo Astudillo y Miguel Roa.
Otro punto destacable del disco es el trabajo de Álvaro Sequeida en batería. Tiene el atrevimiento de matizar y cambiar ritmos dentro de los temas con un desparpajo que se agradece y admira. Sumamente preciso y jugado. Le da claramente un valor adicional al disco.
Los temas en sí, aparte de lo parejo que mencioné más arriba, son muy potentes, no dan tregua. Transcurren uno tras otro sin casi notar cuando terminan o empiezan. Las pausas son simplemente un respiro para continuar con el tema siguiente.
La producción, grabación y mezcla del disco, a cargo de Gabriel Hidalgo (Hidalgo, Six Magics, Husar) y el experimentado Juan Pablo Donoso (Sadism, Thornafire, Pentagram) aporta con un sonido limpio y pulcro – con la suciedad suficiente para el estilo de la banda – al resultado final del disco.
Por otro lado la presentación del disco, cuyo trabajo se ha hecho en conjunto con los ya conocidos Australis Records, es de lujo. Una costumbre dentro de dicho sello. Eso se aplaude porque le otorga aún mayor profesionalismo al trabajo hecho por los músicos.
En términos generales, un discazo para los adictos al estilo, que sigue la vena de bandas como Deicide, Suffocation ó Dying Fetus. Además, este disco es una prueba elocuente de lo fuerte de la escena deathmetal en nuestro país, con tremendos discos editados este año, entro los cuales por supuesto se encuentra este trabajo.
Un deber para los seguidores de la banda, del estilo y del metal chileno en general.