TítuloEclipse Nox Coagula
Duración39 Minutos, 25 Segundos
Año de Lanzamiento2012
SelloAustralis Records
Tipo de LanzamientoLP
Página WebThornafire
Contactovmacnamara@aim.com
- Carnaval Caos
- Malefactor Manifiesto
- Ruptura
- Vulgar Medium Ectoplasma
- Inmortal Agonía
- Desintegración
- Disarmónia Tensión
- Sumisión
- Final
- Soluto
- Victor Mac-Namara(Guitarra y Sintetizador)
- Juan Pablo Donoso(Batería)
- Christian Argandoña(Bajo y Voz)
Eclipse Nox Coagula es el título de la tercera y última placa de los death metaleros Thornafire, lanzamiento que data desde el 30 de Junio de 2012 a través de Australis Records e Ibex Moon Records, misma fecha en que los nacionales se encontraban en una exitosa y extensa gira europea que los llevó a países tales como Alemania, República Checa, Rumania, Polonia y Lituania.
Grabado, mezclado y masterizado en Sade Studios por los reconocidos músicos nacionales Gabriel Hidalgo (mezcla) y Juan Pablo Donoso (baterista de la banda), Eclipse Nox Coagula representa una apuesta en la cual podríamos hablar de lecciones y cambios.
Por el lado de las lecciones, sentadas en las diferencias con su antecesor, Vorex Deconstrucción (2009), eliminando el exceso de teclado y sintetizadores que más que aportar resultaron confusos en la composición; además, la inclusión de cierto groove y buenas dosis de Thrash Metal, dando mayor “violencia sonora” a este trabajo y un incentivo de energía extra, aquel que permite mover más que la cabeza al escuchar Death Metal. Por el lado de los cambios, el alejamiento de Alexis Muñoz (Voz y Bajo) en el año 2011 de la banda, incluyendo desde entonces a Christian Argandoña en la misma función, quien mantiene un registro vocal parecido pero con distinto trato en la composición de las letras (escritas junto a Patrizio Araya), las que pasaron de un plano esotérico a uno más contestatario.
El LP cuenta con diez tracks, sin estar exento de un buen inicio. Carnaval Caos toma el primer lugar, llevando de partida unas buenas masas en la batería, riffs de guitarra golpeados y un bajo oscuro haciendo la antesala al “caos”. Luego, el bautismo de fuego de Argandoña en la voz, quien cumple las expectativas con una buena voz y una correcta prosodia, muy escasa en las ramas del Metal extremo donde con suerte al leer la letra entiendes un growl.
Así se da la tónica del disco en general: mientras se mantiene el peso del Death Metal, la música adquiere más variables y escapa a un estilo purista. La octava más arriba en los riffs da aquel guiño al Black Metal que puede apreciarse a lo largo del disco, junto con aquella característica del Thrash que lo hace más lúdico pero sin perder agresividad, ni la gravedad usual del Death. La atmosfera es complementada por sintetizadores en el inicio, intermedio o termino de algunos temas, no interrumpiendo las canciones, pero algo pasados en reverberación.
Malefactor Manifiesto es el segundo track de Eclipse Nox Coagula, elegido como single por la banda, y probablemente el tema más “oreja” del disco, jugando bastante con los tiempos de ejecución de cada instrumento y uno de los temas en donde se cuidó más la sincronía letra/instrumentalización; y aquí es donde sale a flote un problema: de pronto aquella sincronía se pierde, dejando la adaptación de algunas líricas como uno de los puntos débiles del disco. Pero cabe destacarlas a nivel literario de todas maneras, pues representan una liberación de conciencia notable, llenas de sinceridad agresiva, de protesta bruta: rabia con pasión y sin compasión. Su estructura es bastante libre, mezclando rimas de vez en cuando o dejando que la conciencia hable. La crítica es dura, sobre todo contra la sociedad, sus ídolos e instituciones, y las maneras de vivir.
Prosigue Ruptura levantándote de inmediato del asiento con una feroz patada en la raja cara, llena de velocidad. En cuarto lugar aparece Vulgar Medium Ectoplasma, que quita el pie del acelerador respecto a su antecesor y da paso a una melodía más tranquila, pero que toma la esencia del mid-tempo y gradúa su intensidad en el transcurso del tema.
Inmortal Agonía es el tema central en la lista, uno de los mejor logrados y cargado a pasajes técnicos, donde Victor Mac-Namara destaca en la ejecución de la guitarra, sin restar méritos por supuesto a la interpretación de sus compañeros. La inyección de brutalidad y velocidad vuelve a la carga con Desintegración, una pieza digna de destrucción con harta mezcla de Death y Thrash Metal. Sucede Disarmónica Tensión, volviendo un poco a la calma y confirmando una característica de zigzagueo entre cada pista: alternación de tiempos y velocidades, colocados de manera inteligente.
Procede Sumisión, con un intro de guitarra acústica que da paso a las protestas desgarradoras de Argandoña (no la vieja culiá, el vocalista y bajista de Thornafire) y la velocidad característica de la banda. Si a esta altura la agrupación les recuerda a Krisiun, no están equivocados, sobre todo en este tema que tiene un riff muy similar a Kings of Killing (Apocalyptic Revelation, 1998).
Ya finalizando, y valiendo la redundancia, Final se adjudica el honor de ir cerrando esta placa con un tema que, como fue costumbre en el desarrollo del disco, utilizo el slow-mid-fast tempo como recurso integral, junto con la inclusión de sintetizadores que calzaron mejor y de más inteligente forma que en Vorex Deconstrucción, dando pausas, densidad y atmosfera equilibrada a los temas. En último lugar, Soluto aparece con una extraña interacción de tonadas de clavicordio barroco con sonidos diversos, disolviéndose de a poco para poner el candado a casi cuarenta minutos de Metal chileno.
Respecto al artwork del disco, el material se presenta en un cuidado formato digipack, más un booklet de 12 páginas a “todo color”, como a algunos les gusta decir. Una bonita ilustración en portada retocada digitalmente, predominando los tonos azules, centra la atención en la figura de un humano de ojos vendados a corazón abierto, desgarrando su pecho mientras es acechado por serpientes y acosado por horrores quirúrgicos y varios.
El resto del arte es una especie de collage entre imágenes de la banda, fotografías de Santiago, fotografías varias, símbolos y serpientes que de pronto figuran muy desconectadas entre si, sin mucha coherencia, pero que haciendo una revisión integral de las letras que se superponen, logras encausar en parte una interpretación. Destacan además una pequeña imagen del gran Víctor Jara; en la contratapa del booklet, una ilustración digital con la técnica de la pluma inglesa de una serpiente rodeando un corazón, más cucarachas alrededor, junto con una leyenda que reza “Verdammnis uber die Menschheit in ihrer Lethargie und Faulheit” (Condenación de la humanidad en su letargo y pereza), acompañándose más abajo por la frase “El temor y la esperanza nacen juntos y juntos mueren” del escritor y poeta italiano del siglo XVIII, Pietro Metastasio.
En resumen, el famoso dicho “dos es compañía, tres son multitud” en este caso no corresponde. Cuatro serían multitud, considerando que el trío Mac-Namara (Guitarra y Sintetizadores), Donoso (Batería) y Argandoña (Voz y Bajo) se las arregla perfectamente ante la ausencia de un segundo guitarrista, pues en el resultado de Eclipse Nox Coagula no se echa de menos. Un excelente guitarrista; un buen bajista marcando compás a los riffs más una buena voz; y un buen baterista marcando bien los tiempos, pero que debió ser un poco más explosivo en los blasts.
No se encontrarán con el típico Death Metal: tienes riffs del corte Blackened Death, muy marcado en bandas polacas como Behemoth o Hate; tienes el groove del Thrash que da aquella característica más lúdica, pero cargada a lo agresivo, como el Sepultura primitivo; y tienes por supuesto, Death Metal, con la intensidad y destreza que lo caracteriza, con guiños a Krisiun.
¿Recomendable? Por supuesto. Es Thornafire, sin decepciones en su tercera entrega, mejorando los excesos atmosféricos del disco anterior, y ofreciendo un buen material para añadir a la colección. Salvo la confusa mezcla conceptual del artwork, todo lo demás estaría Ok.
Cómprelo con todas las de la ley y no piratee. No sea gil.