Al llegar al Movistar Arena lo primero que llamó la atención fue que había sillas en cancha, algo que molestó a varios asistentes por distanciar el escenario de quienes quisieran estar más cerca de los músicos, pero que por haber butacas, quedaba sólo la posibilidad de sentarse muy al costado o más atrás.
Además, el escenario fue montado justo en la mitad del recinto, con la finalidad de que se ‘viera más lleno’, algo que se complementa con el hecho de haber colocado sillas. Daba la impresión que se vería una obra de teatro más que esperar un concierto de rock con todo lo que ello significa. Lo anterior porque la ubicación cancha, en su generalidad, se disfruta de pie, porque si no se quiere estar parado, se opta por plateas o galerías.
Bueno, sólo es de esperar que se tomen mejores decisiones al respecto, ya que eso también va en desmedro de la conexión del público con los músicos y viceversa, dado que el obligarlos sentarse, le resta adrenalina a ambas partes (músicos y audiencia). Sin embargo, cabría la posibilidad de considerar razonable esta acción tomando en cuenta las 3 horas y media que duró en total el concierto (eso sí, con 2 intervalos de 20 minutos aproximadamente para cambiar el back-line de las bandas).
Steve Morse
Pocos minutos antes de las 9 de la noche, Steve Morse (ex Dixie Dregs, Kansas y actual guitarrista de Deep Purple desde 1995) sale a escena junto al actual bajista de la banda The Flying Colors, el estadounidense Dave LaRue (ex Joe Satriani, Dixie Dregs y Planet X, banda del ex Dream Theater, Derek Sherinian) y, completando el power trío, el baterista Van Romaine.
Dentro del repertorio sonó ‘John Deere Letter’, donde hace una clara reminiscencia al country del viejo oeste americano, y donde, si alguno alcanzó a percatarse, hubo un pequeñísimo desfase entre Steve y Romaine cuando terminaron la canción, lo que sacó una sonrisa de Morse. Esa es la actitud que debieran tomar algunos músicos cuando se equivocan; en vez de enojarse, debieran seguir disfrutando con lo que viene, mi humilde opinión. La hermosísima ‘Baroque ‘n Dreams’, interpretada con una guitarra electroacústica por Morse acompañado del bajo de LaRue, llenó el recinto de sonidos medievales y barrocos que deleitaron a los que tenemos debilidad por este estilo de música. ‘Rising Power’ trajo cortes progresivos, riff potentes y melodías con atmosfera “Morse”, incluido un mini sólo de bajo.
El final la primera parte del espectáculo finalizaría con ‘Cruise Control’, tema de Dixie Dregs (1977), el cual es incluido en el gran medley del álbum de Dream Theater, ‘A Change of Seasons’. Algo que es una clara comprobación de que Morse es el guitarrista preferido y gran influencia de Petrucci, admiración reconocida por el mismo seis cuerdas del “Teatro de los Sueños”. En este sencillo hay un pequeño lucimiento de batería y luego un ‘juego’ o ‘duelo’ entre la guitarra y el bajo, recordando los tiempos en que Jon Lord (R.I.P.) y Morse tocaban en Deep Purple, donde uno fraseaba y el otro respondía. Así concluía un entretenido show de 45 minutos aproximadamente.
Setlist Steve Morse
- Name Dropping
- Highland Wedding
- On the Pipe
- Vista Grande
- John Deere Letter
- Baroque ‘n Dreams
- Rising Power
- StressFest
- Cruise Control
John Petrucci
Pasadas las 22 horas, John Petrucci sale a escena con una introducción apoteósica y casi apocalíptica con un gran coro como base. Claramente es un sonido más fuerte, definido, con más presencia que la banda de Morse, donde el guitarrista por su parte hace uso de todos sus efectos al máximo y al límite de la distorsión. Hay más juego de luces, y tiene, o por lo menos intenta, tener más conexión con el público instando un par de veces a disfrutar más de su show.
Se hizo acompañar por el legendario bajista Dave LaRue y a la perfección por el actual baterista de Dream Theater (ex Annihilator, Extreme y Steve Vai), Mike Mangini. Éste último demostrando el por qué es uno de los mejores bateristas del mundo que pudo reclutar Dream Theater con esa velocidad de manos fuera de lo común (no por nada a ganado 5 veces el record mundial como el baterista más rápido).
Indudablemente, los temas más aplaudidos fueron los de su primer y único álbum en solitario de 2005, ‘Suspended Animation’, de donde se extrajeron los cortes ‘Damage Control’, ‘Jaws of Life’ y ‘Glassgow Kiss’. Por otro lado, ofreció tres nuevas composiciones, donde destacó la extrema rapidez de Mangini para tocar con una mano en el sencillo ‘Glassy-Eyed Zombies’.
El show de Petrucci se extendió casi por una hora.
Setlist John Petrucci
- Damage Control
- Cloud Ten
- Jaws of Life
- Zero Tolerance
- Glassy-Eyed Zombies
- Glassgow Kiss
Joe Satriani
Ya eran las 23:15 cuando aparece el precursor y dueño de este fenómeno llamado G3, el “alienígena” Joe Satriani (ex Deep Purple por 7 meses entre diciembre de 1993 y julio de 1994), con un sonido, efectos y actitud demoledora; gran interacción con la gente, muy relajado, moviendo sus dedos a la perfección, usando sus clásicos pero no menos llamativos efectos de acople y palanca de vibrato que pareciera hacer gritar su Ibanez.
Junto al “maestro”, están los músicos Allen Whitman en el bajo, Mike Keneally en los teclados, y el eterno e inseparable baterista Jeff Campitelli.
Lo bueno es que la presentación de Satriani también da el pie para que el resto de la banda pueda lucirse, como sucedió con el solo de piano de lujo de Keneally antes de tocar ‘Crystal Planet’. Con ‘God is Crying’ se pide la participación del público mediante palmas mientras el líder y el encargado de los teclados se enfrentan en un muy buen “duelo”, en donde Joe hace un pequeño homenaje a uno de sus mentores e influencias, Jimi Hendrix, tocando con los dientes y el tecladista, para estar a la altura de su “contendor”, toca con su mano izquierda y su mentón. ¡Notable!
Dentro del repertorio también sonó ‘Always with me, Always with you’, momento en el cual se vio a varias personas emocionadas, y ‘Crowd Chant’, donde el guitarrista hace cantar y participar al público con su guitarra y Campitelli marcando en su bombo con negras.
En todos los temas Satriani hace alardes de su destreza única y admirada por muchos. El público de apoco fue entusiasmándose al ver la entrega del mismo Joe y sus compañeros de banda; el bajista no menos virtuoso pero sí más ‘movedizo’, quién toca con uñeta (haciendo que el sonido sea un poco menos profundo, con menos peso y menos presencia que su colega LaRue, quién toca con los dedos). Por el otro lado, Campitelli se ríe al saltar un pedazo de su baqueta lejos, soltándola hacia atrás y tomando otra sin notarse en el sonido. El SEÑOR de los teclados muy afiatado y compenetrado con el resto de los músicos, sin mencionar el nivel de su voz, la cual tiene un nivel superlativo para ser un tanto desconocido.
Setlist Joe Satriani
- Ice 9
- Satch Boogie
- Flying in a Blue Dream
- Crystal Planet
- God is Crying
- Always with me, Always with you
- Crowd Chant
- Surfing with the Alien
G3
Finalmente llega, tal vez, lo más esperado de la noche: ver a G3 en pleno. Así, Satriani llama a Steve Morse y luego a John Petrucci, quién hace una reverencia a Joe, arrodillándose y alabando al “maestro”.
En conjunto interpretaron ‘You Really Got Me’, el clásico tema de los Kinks, seguida de un cover de Cream con la canción ‘White Room’, más un par de compases de ‘Sunshine Of Your Love’, en la misma línea, al finalizar el tema.
Algo para no olvidar se vivió con ‘Rockin’ in the Free World’ (cover de Neil Young) ya que, aparte de ver a tres de los más grandes guitarristas de la historia, pudimos disfrutar de un sonido como pocas veces de escucha en el Movistar Arena (por lo menos desde la ubicación cancha). Ver a esos músicos disfrutando, entregándose al máximo hasta observar que hacían todo lo que podían, respetándose y admirándose al mismo tiempo; aunque, a decir verdad, en algunos momentos Satriani demostraba mucho que él “mandaba”, lo que Morse y Petrucci asumían con total naturalidad.
Ya eran las 00:30 horas cuando terminó el show, despidiéndose todos muy larga y afectuosamente; Petrucci un tanto más efusivo y generoso con sus uñetas, siendo éste mismo el último de los músicos en desaparecer del escenario.
Setlist G3
- You Really Got Me (cover de los Kinks)
- White Room (cover de Cream)
- Rockin’ in the Free World (cover de Neil Young)
Fue un deleite para los oídos escuchar el nivel de estos músicos, y no me refiero sólo a los guitarristas, ya que todos y cada uno de los integrantes de las bandas demostró por qué los que intentan o lo que son músicos los miran y se refieren a ellos como “dioses”, “maestros”, “profesores”, “ídolos”, “capos”, etcétera.