Para nadie es un misterio que los días Domingo son bien malos para realizar eventos. Tan así fue el 24 de Junio pasado, en el Teatro Novedades, que asistieron menos de 200 personas a ver a una leyenda del Death Metal como lo es Incantation. Ya fue sorprendente llegar al recinto cerca de las 19:00 Hrs. y ver a 30 personas dispersadas en la entrada; al preguntar a la gente de segudidad si el público ya había entrado y que te digan que “este es el que ha llegado” es muy lamentable. Con un, ya normal, retraso comenzó este concierto, que prometía mucho, ya que la anterior vez que Incantation agendó fecha en Chile, estas fueron canceladas.
El inicio lo dio Denying Nazarene, que sin sonar muy bien, logró prender a las pocas personas que en ese momento estaban en el teatro. Con una propuesta muy similar a lo que hace Incantation, el quinteto se paró sobre el escenario por aproximadamente 45 minutos, el cual ha mejorado bastante desde la vez que los ví hace ya un par de años. Sin embargo, siento que aun tienen mucho más para entregar, y espero que eso se vea reflejado en sus próximos trabajos.
Al rato, Thornafire, la otra agrupación nacional, se subió al escenario. Con un sonido algo mejorado, el grupo tocó una cantidad similar al anterior. Sin embargo, nunca me ha podido convencer este cuarteto. En ciertas partes, los riffs se hacían muy monótonos y pegados. No había precisión en la ejecución de la batería, y a veces en partes muy rápidas se les iba en “collera” los blast beat.
Algunos minutos después, la nota “rara” de la noche, Funerus. Este trío de Pennsylvania, EE.UU., que cuenta en sus líneas con el mismísimo John McEntee, y su mujer Jill Daily McEntee, comenzó a tocar tal como si fuera una prueba de sonido y con problemas con el pedal de overdrive de la vocalista/bajista que al parecer tenía gastada la batería. Luego de unos 15 minutos aproximados de show, con 3 temas interpretados, Jill Daily McEntee se quitó su bajo y se fue del escenario, quedando en él John McEntee y el baterista, el cual no era Kyle Severn, y salió a escena un bajista desconocido y partió Incantation.
Con un sonido bastante bueno, nítido y brutal, Incantation tocó no más de 45 minutos, algo muy desilusionante para un fan del death metal, que quería escuchar mucho más. De todas maneras, se mandaron unas joyitas como lo fueron Impending Diabolical Conquest, The Ibex Moon, Profanation, Etc. Faltó mucho por escuchar, solo a la rápida me acuerdo de Rotting With Your Christ, Anoint The Chosen, Extinguishing Salvation, Blasphemy, Etc. No sé la verdadera razón por la cual hayan tocado tan poco, si fue por la poquísima gente, o mala organización, no lo sé, pero es de esperar que estas situaciones no se repitan, ya que es una lástima que un grupo con la trayectoria que tiene Incantation, sean cortados.
Review: Cristobal González
Fotos: Roberto Yévenes M.