Review: Six Magics en vivo – El Regreso del Power Metal Chileno

Cuando supe que Six Magics daría su primer y único concierto en Chile este 2011 en el Teatro La Cúpula pensé “wow, chuta que están grandes estos chicos”. Y es que son pocas las bandas chilenas, productoras de metal, que pueden darse tantos lujos como estos cinco muchachos.

No es ningún secreto para todos que en Chile es poco valorado al músico y con mayor aún al músico metalero, para los grandes conglomerados musicales es poco rentable reproducir un poco de heavy nacional, así que caen rendidos ante fenómenos pseudoartísticos como el reggaetón. Si bien están en todo su derecho de hacer eso, no está demás agregar que esta situación tan desfavorable para el rockero nacional es, en cierto modo, para los chilenos un valor agregado que nos convierte en parte de una selecta elite que conoce todo este maravilloso mundo oculto bajo el pop comercial y la música centroamericana.

La Obertura

Alrededor de las 18 hrs. ya se instalaban los primeros metalheads en las afueras del Teatro La Cúpula. Bajo el fuerte sol que asolaba al Parque O’higgins, no dejó de ser curioso y anecdótico como en las afueras del recinto una suave brisa al más puro ambiente sureño que evocaba los acordes de “Chiloé The Creation”, bañaba a la decena de jóvenes que esperaban que las puertas se abrieran. En una proporción un poco menor, estos no tenían nada que envidiarle a los que en otras ocasiones hacían vigilia en las afueras del Teatro Caupolicán o del Movistar Arena, esperando a grandes como Helloween o Symphony X.

Ya a las 19:00 Hrs. en punto se abren las puertas del recinto, exactamente media hora antes del show. Es momento de ingresar al sector donde se desarrollará la performance de los, ahora, cinco mágicos. Me llamó la atención ver como en un extenso pasillo en dirección al escenario se encontraba un puesto asignado para souvenirs varios. Allí podías encontrar desde poleras con los diseños de todos los discos hasta las últimas ediciones del Animal (pronto material de colección). Estaban también versiones japonesas del Behind the Sorrow junto con los más caractéristico del lugar: tazones con los rostros de la banda. Todo un punto al emprendimiento. Sin olvidar la instalación de un puesto de comida rápida de una reconocida marca, además de un stand de una Universidad que presentaba carreras relacionadas al sonido.

Desconozco las razones por los cuales el show no partió a la hora. En lo personal, me llamó la atención que un evento tan promocionado, y que se elevaba por sobre las tradicionales “tocatas” para ser un “concierto” con todas sus letras, estaba comenzando bastante más tarde de lo esperado. Quiero imaginar que fue debido a la conocida impuntualidad de la mayoría de los fanáticos que llegaron entre 19:30 y 20:30 Hrs., gracias a ellos, creo, el concierto comenzó poco más de una hora tarde. Ojo muchachos que decir que apoyamos el metal criollo es mucho más que comprar discos, es también hacer patria con la puntualidad y rendir tributo a nuestros compatriotas llegando a la hora a los compromisos pactados.

Comienza el Show

Pasado la 20:30 hrs se encendían las luces del escenario para dar paso a la obertura de Pablo Stagnaro. Tras un par de minutos de musicalización instrumental, donde el baterista creaba la atmósfera para lo que se venía aparecía con todo su poder el camión ‘Lies and Rules‘, La Cúpula se venía abajo bajo el poderoso sonido de los acordes de Ávila y Sepúlveda. El tema llegaría a la mitad porque con una rápida pasada entraba ‘No Time to Grieve‘, otro sencillo del último disco. Six Magics apostaba por la rudeza, canciones nuevas pero que aún conservaban agresividad.

Tras esa primera pasada y con un gran aplauso por parte del público que estaba bastante eufórico, era hora de ejecutar otro grande: sonaba ‘Animal‘, título excepcional de la primera edición del disco Behind The Sorrow. El ambiente era ameno, el público acogedor y la banda se notaba que disfrutaba el regreso a tierras chilenas. El repaso a los últimos trabajos finalizaría con ‘I Remember‘ y con ‘It’s not the Way‘, tema que siempre consideré genial para un eventual single, con tintes comerciales, nostalgia y buen sonido.

Elizabeth Vásquez saludaba al público chileno, le agradecía por haber venido, por esta presentes en este regreso, repitió varias veces que extrañaba tocar en Chile, agradeció a sus amigos de “Brotherhood of Metal”, quienes vinieron directamente desde Alemania a presenciar el concierto. Era hora de seguir con el show y era hora de volver al pasado glorioso que condecoró a Six Magics con la fama que ahora ostenta. Era tiempo de un medley de ‘Storm‘ e ‘Infinite Keeper‘.

No les voy a mentir, la banda partió sólida con sus últimos temas, pero el sonido de sus antiguas canciones, cercanas a las vertientes progresivas terminó por reventar al público que no paraba de saltar y gritar. La Cúpula se venía abajo y la banda no podía hacer nada más que seguir tocando.
Un punto para Elizabeth, que los temas cantados por “Panqueque”, le suenan excelente.

Ya pasada la catarsis de, el regreso al pasado, era hora de volver no sólo al presente, sino que al futuro. Six Magics está ad portas de lanzar su 4ta producción en estudio así que la banda decidió presentar por adelanto algunos temas nuevos. ‘Falling Angels‘, con un sonido cercano al thrash y un notorio perfeccionamiento del actual perfil que están tomando fue bastante aceptado por el público.

Tras adelantar un poco del nuevo sonido, los nacionales siguieron repasando éxitos, así que ahora fue el turno de ‘Run‘ y ‘They‘, los cuales no hacían más que demostrar que si bien Six Magics ha cambiado mucho en el último tiempo. Su público ha seguido siendo fiel y lo mejor de todo, han cosechado aún más fanáticos. Finalizaba este repaso con un espectacular solo en bajo del gran Mauricio Nader.

El interludio, los invitados

Posterior a esto comenzó la denominada segunda parte del concierto. Y acá quiero detenerme un poco puesto que tiene dos partes que quiero comentar. Todo partió con dos instrumentales del proyecto solista de Erick Ávila que será lanzado el próximo año, ‘Aachen‘ y ‘Ranco‘, fueron escuchadas con atención por el público, cada una con su magia, virtuosismo y buen sonido. Posterior a esta ejecución Elizabeth presentó lo que sería un tributo a los “grandes de la música que no están con nosotros”.

Acá quiero comentar lo anecdótico de escuchar a una de las mejores bandas de Power Metal chileno interpretando desde canciones de Queen, pasando por Michael Jackson hasta… Amy Winehouse. Sí… Amy Winehouse.

Guardaré mis comentarios gruesos al respecto para quedarme con lo anecdótico de esta pasada. La banda está apostando por cosas nuevas y en general el público lo recibió de buena manera.

Lo que no puedo dejar pasar es lo que ocurrió después de este medley. Elizabeth comentó al público lo que mencioné al inicio de esta nota. Hacer metal en Chile es difícil y existen muchas bandas que matarían por compartir un poco de la fama de Six Magics. Así que los cinco no hallaron nada mejor que invitar a algunos colegas al escenario para mostrar un poco lo rica que es la escena metalera chilena.

Hasta el comienzo todo bien, es una idea interesante y es bueno que el círculo metalero haga gala de una camaradería ad hoc al sentimiento que tanto pregonan. Sin embargo, subir al escenario a grandes como Ives Gullé, Nasson, Ery López y Javier Sepúlveda para interpretar ‘Eye of the Tiger‘, lo encontré un poco contradictorio y demás. Yo habría invitado a estos músicos a colaborar con canciones de la banda. Vale decir, por ejemplo a Gullé como vocalista invitado en alguna canción y así con lo demás. Se agradece el gesto pero no podía dejar de comentar lo que yo considero un error de la banda y una mala jugada para con los músicos chilenos.

Finalizada esta parte del concierto, volvimos a lo que nos citó la banda: escuchar buen rock. ‘Another Name‘, el nuevo single de los santiaguinos era lo que sonaría y haría vibrar a los fanáticos que no paraban de saltar. A pocos días del lanzamiento online, la gente lo cantaba como si siempre lo hubiese escuchado.

El Prólogo

La presentación de los nuevos temas finalizó con ‘I remember‘, un tema cargado de melancolía, con cierto dejo a They. Un eventual single radial. Buena ejecución y una atmósfera oscura y triste. Gran tema, un poco lejano del metal pero muy bueno.

Para retomar el ánimo un poco cansado ya a estas alturas sonaría un gran clásico del Behind the Sorrow. A mi juicio el mejor tema que este disco tiene: ‘All my dreams‘. Y es que este tema tiene una atmósfera muy especial, a veces me recuerda un poco al actual Nightwish con esos estribillos de Elizabeth y esas guitarras de Pablo y Erick, nada que decir, el público lo cantaba con todo sus pulmones.

Luego a esto dos nuevas instrumentales serían interpretadas por la banda. Acá creo que estuvo demás esta parte puesto que el tiempo transcurrido entre el medley y el cover fue bastante largo por cierto, sin mencionar que Ávila ya nos había deleitado con dos canciones solistas más, que por cierto eran geniales. ‘Binsfeld‘ y ‘Vica‘, iban dedicadas a los camaradas alemanes y viñamarinos, respectivamente. Un punto menos por lo repetitivo pero un punto más por lo emotivo de la situación.

Six Magics hasta ahora nos traía un buen concierto que, si bien a juicio exclusivamente personal, se desinfló un poco en la mitad, volvía con lo mejor de su característico sonido al interpretar grandes clásicos como ‘Prince of pure Light‘ y ‘Behind The Sorrow‘. El público volvía a agolparse adelante para responder ese cariño que tanto tiene con estos verdaderos embajadores del metal chileno.

Y para rematar: el sello de oro. ‘Trauco‘ y ‘Caleuche‘ hacían gala final de un concierto que se coronaba como uno de los grandes en cuanto a la música chilena. El público cantaba (y bien modulado) cada uno de los pasajes de estas dos grandes canciones que hablan de nuestro folclore. Six Magics encantó al país con esta música, con estas canciones y con este sonido. Era lógico que tuvieran que finalizar con estos temas que los llevaron a la fama. El público lo agradecía, estaban en casa, estábamos en familia.

El metal chileno se vistió con traje grande esta noche de 9 de noviembre y le quedó bien la tenida. Es hora que más bandas como Six Magics se atrevan a dar un paso adelante y trabajen de forma profesional con sus proyectos. Siempre repetiré que Chile tiene una gran cantera metalera, es hora de explotarla como corresponde. Es hora que el emprendimiento también colme el universo rockero y metalero para lucir ese gran valor oculto que es el sonido metal. Por la música, por nosotros.

¡Viva Chile, Viva el Metal!