No lo habíamos hecho antes, y esperamos que no sea la última. Esta vez, nos toca “escuchar por los ojos” para sumergirnos en un pedazo fundamental de nuestra historia y escena metalera nacional: PENTAGRAM CHILE.
Pero antes, es menester reconocer en cuanto a obras concretas, la poca pero importante bibliografía metalera chilena al respecto. Los honores van para Andrés Padilla y su Retrospectiva al Metal Chileno (1983-1993) (2009); y por supuesto, al autor del libro que nos convoca, Patricio Jara, quien además es el responsable de Pájaros Negros, Crónicas del Heavy Metal chileno (2012). Les sugiero que si gustan de la lectura y quieren conocer un poco el patrimonio metalero nacional, los tengan en sus repisas.
Volvamos a Pentagram, el libro.
Esta obra es un excelente spin-off de Pájaros Negros (2012), contemplando todo aquello que no cabía en sus notas al pie o que podía concentrar demasiado los contenidos en una sola cosa; una buena forma de satisfacer la sensación del “me gustaría saber más de esto”. Además, es un merecido registro y reconocimiento a la banda más importante, en proyección e influencia, de la historia del Metal chileno y no menor, como parte fundacional de la historia global del género. No por nada Mitch Harris, guitarrista de NAPALM DEATH, es citado en la contratapa del texto y en su interior confesando su fanatismo por los nacionales.
De acuerdo al libro y la misma realidad, no podría decir que PENTAGRAM CHILE haya tenido un auge realmente sólido en su momento, pero si puedo decir que están cosechando los frutos de una semilla sembrada hace treinta años, y con justicia. Un árbol que se hizo fuerte en raíces pero que creció hacia abajo, el que ahora saca a tierra sus ramas sin las limitaciones de un tiempo políticamente complejo, lleno de precariedades, imbecilidades (como llenar de pollos a una banda), prejuicios o circunstancias que a cualquiera harían tirar la toalla (como el contrato discográfico que pudo hacerlos más grandes que Sepultura y que no se llevó a cabo), pero que los nacionales soportaron a pesar de todo, reflejándose en la madurez de su actual regreso.
Quizás esta sea la época en que podría declararse un merecido clímax, de acuerdo al reconocimiento nacional e internacional que han logrado con presentaciones locales y en festivales extranjeros. No quiero contarles muchos detalles, ya que el libro es bastante corto, pero muy preciso… y cuando digo preciso, es porque realmente te encontrarás en poco con más de lo que querías saber.
Para resumir más el contexto, si eres de tiempos reducidos, de seguro el texto te caerá de perilla. Es un viaje literario a través del tiempo en el que se hace luz y justicia sobre las certidumbres e incertidumbres que envolvieron a la banda. Una obra de pluma astuta y rápida, entretenida en la lectura, que integra las distintas visiones y anécdotas de los personajes más fundamentales en el origen, desarrollo, ocaso y renacimientos periódicos de la banda, hasta la conclusión de su primer LP The Malefice (2013) y la consolidación de PENTAGRAM CHILE como leyenda sudamericana.
En cuanto al diseño, es un libro de 20×20 cm que mantiene los valores blanco y negro en estética, muy fiel a los inicios cromáticos de la agrupación, de buena factura material en encuadernación rústica, algunos barnices aplicados y papel couché opaco de alto gramaje. Esta separado por una primera parte en español y la segunda en inglés con el mismo contenido, más la inclusión de imágenes que te sitúan en las distintas etapas de la agrupación. Una edición de lujo que por su estética y configuración, se vería bastante bien al lado de una colección de vinilos o discos.
¿Recomendable? Totalmente. Puedes encontrar el libro en tiendas The Knife, Rock Music (Eurocentro) y BigStore.
Atentos además a Pájaros Negros II, libro del cual habrá novedades en los próximos meses, continuando con el importante y prolífico aporte documental de Patricio Jara al Metal nacional.