Los shows de Mar de Grises siempre generan altas expectativas, y las razones están a la vista. Es una banda exitosa, con dos excelentes discos a su haber y un futuro más que prometedor. Por eso no extraña que el pasado sábado 16 muchos fanáticos se agolparan en el Bar Óxido del barrio Bellavista a ser parte de una nueva presentación de Mar de Grises, quienes se hicieron acompañar muy bien de dos bandas de excelente calidad como lo son Inanna y Desire of Pain, en una noche que prometía Metal criollo de la mejor factura.
Inanna
Para comenzar, disfrutaríamos del excelente Death Metal de Inanna, quienes se encuentran promocionando su placa recién salida a fines del año pasado, Converging Ages, y mostrando material de lo que será su nuevo álbum. Cuando faltaban cerca de treinta minutos para la media noche (la puntualidad como siempre nota cero), se escucharon los primeros acordes de guitarra que anunciaban el inicio de la tocata. A esa hora ya se veía bastante gente dentro del local, y buena parte se acerco al escenario para escuchar la interesante propuesta de la banda de Max Neira, que sin mucho preludio comenzó su show con Gilgamesh, un potente track perteneciente a su disco debut. Lamentablemente el sonido no estaba a la altura y buena parte de los instrumentos se perdían tras la batería.
En seguida vino The Delicate Balance of Terror, un verdadero cornete-in-the-face, donde las primeras chascas comenzaron a menearse al son de los potentes riffs de guitarra de aquel tema. Luego de que la banda acusara unos cuantos problemas técnicos, vino un tema del nuevo repertorio de Innana, Age of Decline, donde las siete cuerdas de Carlos Fuentes tomaron fuerte protagonismo. El sonido aun no acompañaba del todo la presentación, pues las cuerdas de Diego Ilabaca y Carlos Fuentes tendían a perderse tras la batería de Felipe Zará, quien a pesar de los problemas técnicos ejecutaba como un reloj sus brutales blastbeats. Detalles técnicos aparte, la banda derrochaba energía sobre las tablas, todo acompañado de un sugestivo juego de luces y humo, que hicieron de la presentación un espectáculo sumamente interesante, como pocas veces se ve en el Óxido. Con el sonido ya mucho más nítido; siguió The Lighthouse, un delicado instrumental en que la banda muestra todo el virtuosismo en sus respectivos instrumentos. No puedo dejar de mencionar que dicho tema me recuerda mucho al instrumental Losfer Words, de Iron Maiden, en lo que quizás sea solo un arranque personal de monomanía.
Luego del respectivo saludo al “respetable”, se vinieron dos temas nuevos, I am Become Death y Redeeming Chaos; que muestran la lucidez mental de la banda a la hora de componer y evocan sin mayor problema la brutalidad del Death Metal con la serenidad del Sludge o el Doom Metal más moderno. Finalmente, la banda se despedía con Everlasting Suffering, un tema que resume de buena forma la propuesta de Inanna, basada en innovar con sonidos Death Metaleros, sin quitarles su forma del todo. Un potente y muy cuidado show el que brindó Inanna, como ya nos tiene acostumbrados.
Setlist Inanna:
1. Gilgamesh
2. The Delicate Balance of Terror
3. Age of Decline
4. The Lighthouse
5. I am Become Death
6. Redeeming Chaos
7. Everlasting Suffering
Desire of Pain
Llegó el turno del gran desafío de los hermanos Poblete (Alvaro, Mario y Mauricio) y el frontman Sebastián Silva (Quien también es vocalista de los nacionales Timecode), al compartir cartel con dos bandas de reconocida potencia en la escena local, quienes sin lugar a dudas, lograron mantener la vara alta que Inanna había dejado minutos antes en el Bar Oxido.
Una breve introducción ejecutada por los instrumentales de la banda, conjugada con el agradable juego de luces que se dio esa noche en el lugar, cambiaría drásticamente al escuchar desde la garganta de Silva: “Two voices!”… dando paso a Confession/Regret, una pieza de casi 6 minutos que captó inmediatamente la atención del público, sorprendiendo a más de alguno o alguna que no hubiera presenciado antes un espectáculo de Desire of Pain. Si damas y caballeros, tienen entre 15 y 21 años, y con la notable técnica y entusiasmo que manifiestan, probablemente tengamos un producto de exportación del cual sentirnos orgullosos al pasar los años. Porque no está demás decir que el buen dominio en la guitarra junto a las tres voces (Gutural, grito y melódica) de Sebastián Silva, la excelente ejecución instrumental de Mario y Mauricio en el bajo y guitarra respectivamente, y quizás el punto más alto de la banda, Alvaro, el joven baterista que se “roba la película” con una sólida rapidez y precisión en los tambores.
El sonido para Desire of Pain mejoró en comparación a la banda anterior, salvó por ciertos problemas técnicos en un retorno y en la batería que no fueron para mayor, sino de echarle una manito de gato a los platos. Luego vendrían dos temas nuevos, The Mount of Perdition y The Whisper of Death, canciones que mantienen la dicotomía de la banda entre brutalidad y armonía; un paseo entre lo pesado y atmósferas más quietas. “A Tango between God and Satan”, una frase definida en la temática de los metaleros israelíes de Orphaned Land, que se adapta muy bien a lo que hace Desire of Pain.
Para concluir su presentación, lanzarían las poderosas The Moon is Stained in Blood y Destroy the Madness, pertenecientes, junto a la primera canción ejecutada en la velada, al EP Ashes of Darkness. Con los respectivos aplausos de los presentes, Silva y los hermanos Poblete (Me recuerdan a los hermanos Kolesne de Krisiun) culminaban su espectáculo agradecidos y por supuesto, nosotros también, por una vez más lucirse en los escenarios. A esperar más adelante entonces lo que se viene con respecto a su nueva producción.
Setlist Desire of Pain:
1. Intro
2. Confession/Regret
3. Mount of Perdition
4. The Whisper of Death
5. The Moon is Stained in Blood
6. Destroy the Madness
Mar de Grises
El reloj marcaba casi la una y treinta de la madrugada cuando Juan Escobar y compañía comenzaron su show. Con Sleep just one Dawn y Recklessness se iniciaba un show que desde un comienzo contó con el buen sonido que Mar de Grises acostumbra tener, mas una puesta en escena siempre acorde a la melancólica y parsimoniosa propuesta musical de la banda. Venir a describir lo que hace Mar de Grises hoy por hoy seria puro relleno sin sentido, pero lo que si hay que mencionar, es el cómo varia la calidad del show que la banda brinda cuando cuenta con los extras necesarios para hacer un show diferente. De la mano de todos los artilugios que se montaron para este show, la banda creó una atmosfera notable en el escenario, que se vio correspondida de parte del respetable que aplaudía y vitoreaba a la banda, cada vez que era posible.
La majestuosa Storm, Kilómetros de nada y To See Saturn Fall mantenían atenta a la concurrencia que aún a esas horas de la madrugada era bastante numerosa, haciendo del local un verdadero horno, a pesar del frío que nos esperaba en la calle. Entonces se vino One Posessed, el tema más destacado de Draining the Waterheart a mi parecer, que mezcla y hace música una multitud de sentimientos y pensamientos, lo que resulta en una pieza musical realmente maravillosa.
Seguiría Fantasía y luego Onírica, ambas canciones de atmosferas turbulentas y lentos pasajes, que eran perfectamente acompañadas de un humo que hacía difícil ver a los integrantes de la banda sobre el escenario. A continuación se vendría el que a mi gusto personal es el mejor tema que la banda ha compuesto, El Otro, perteneciente al ya lejano The Tatterdemalion Express, lanzado al mercado hace ya 5 años. Es que en esta pieza de casi 12 minutos la banda conjuga de forma excepcional una multitud de sonoridades y quiebres, logrando un resultado fenomenal, más aun en vivo. A esas horas algunos ya se habían retirado del local, mal que mal eran cerca de las 3 de la madrugada y eso que no hemos hablado de las cantidades monumentales de cerveza que el gentío consumió dentro del local.
Por su parte, la banda llevaba casi una hora y treinta minutos sobre el escenario, y para cerrar rememoraron un tremendo corte del único demo que lanzaran por allá por el año 2002. Con For Just an Eternity, la banda cerraba una maciza presentación de casi 100 minutos en que se dieron el gusto de recorrer lo más selecto de su material, y si bien la galucha termino pidiendo más, fue el mismo Escobar quien tuvo que decir que “no hay nada más que tocar”. Y claro, luego de tocar 11 temas ya habían dejado a todos los asistentes bastante satisfechos y contentos, porque a fin de cuentas el evento no fallo en ningún aspecto. La gente llego en masa, las tres bandas realizaron muy buenas presentaciones y no hubo mayores problemas. Un siete.
Setlist Mar de Grises:
1. Sleep just one dawn
2. Recklessness
3. Deep-seeded hope avant-garde
4. Storm
5. Kilometros de nada
6. To see saturn fall
7. One Possessed
8. Fantasia
9. Onirica
10. El otro
11. For just an eternity
Review: Ignacio Machuca, Pablo Tournelle.
Fotos: Sandra Gonzalez.
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